Servidor de libros Calibre web, primera aventura Docker

Cuando voy a la universidad siempre llevo el Kindle en la mochila, ya que tardo casi 40 minutos pero mi parada es de las primeras y siempre hay asiento. Así que voy a ritmo de más de 30 libros al año. La cosa es que cuando voy a sitios sin la mochila llevar el Kindle es muy engorroso, así que una de estas veces he ido comiéndome la cabeza pensando una forma de llevar los libros sin llevarlos. Así ha empezado la búsqueda de un servidor de libros con Calibre Web usando Docker.

Tiene que ser algo online, así que tendré que usar la Raspberry. Y quiero poder acceder a todo mi catálogo de libros, que guardo en Calibre. Buscando en internet hay tres soluciones, vamos a verlas:

Está bastante claro que la decisión va a ser Calibre-Web. Leyendo la página web parece ser que tiene todas las características del mundo, así que manos a la obra. Hay dos formas de instalarlo:

• Python: Usando pip3 correrá como un servidor más, usando el puerto 8083. La cosa es que tienes que ejecutarlo tú o crear un servicio que lo haga y se pueda reiniciar. Sin contar con todas las dependencias de la instalación.
• Docker: al parecer este método de instalación lo instala en una cápsula con sus propias dependencias. Es independiente del resto del sistema y se puede modificar sobre la marcha, inicia solo, se actualiza y hace sus cosas. Qué bueno, ¿no?

Así que a continuación toca instalar usando Docker. Usando Portainer (un gestor de Docker que es la leche) lo instalo usando el comando para compose de Linuxserver.io. Y ya está, ya funciona. Modifico el usuario y la contraseña y lo configuro para poder entrar desde fuera de casa. Este proyecto me ha flipado bastante ya que le voy a dar bastante uso y me ha servido para probar Docker y Portainer.

Probándolo desde fuera de casa es bastante rápido y puedo retomar la lectura donde la dejé. Es tan potente que hasta tiene un modo oscuro.